Psicomanteum

Este término, mencionado en otra de mis entradas, hace alusión a una técnica de comunicación con los muertos ideada por el psiquiatra y filósofo americano Raymund Moody, autor del best-seller publicado en los años setenta Vida después de la vida, del cual se hizo una película documental homónima. El doctor Moody ha dedicado gran parte de su vida a recoger los testimonios de personas que han estado cercanas a la muerte, y ha llegado a la conclusión de que todas ellas, independientemente de su cultura o religión, coinciden en una serie de experiencias (sonidos audibles tales como un zumbido, sensación de paz y no dolor, sensación de salir fuera del cuerpo, de viajar por un túnel, de ascender al cielo -no al religioso-, vista de parientes ya fallecidos, encuentro con un ser luminoso, revisión de la vida y sensación de aversión con respecto a volver a ella).
El psicomanteum está inspirado en el "oráculo de los muertos" de la antigua Grecia, así como en otras descripciones similares hechas desde tiempos remotos en diferentes culturas de personas que han tenido visiones extraordinarias al observarse fijamente en la profundidad de un espejo, la tranquila superficie de una laguna o una esfera de cristal. El diseño realizado por Moody, que él llama "Teatro de la Mente", consiste básicamente en introducirse en una habitación poco iluminada en la cual se ha de colocar un espejo en ángulo tal que no permita la vista de la propia reflexión de la persona sentada (privación sensorial parcial similar a la de los Experimentos Ganzfeld). La sesión del psicomanteum comienza por un proceso de remoración de la persona con la que se desea contactar, seguido de un ejercicio de relajación profunda, para finalmente pasar a la observación en el espejo a través del cual los particpantes esperan tener un encuentro con la personalidad del ser querido fallecido en cuestión. Las sensaciones más comunes después de realizar la experiencia parapsicológica son la presencia de la persona "invocada" y la comunicación o diálogo mental con ella. Tras aproximadamente una hora practicando el psicomanteum, algunas personas aseguran haber visto transformaciones en el espejo, como si se tratara de una ventana o un torbellino de nubes, después de lo cual experimentan visiones muy vívidas. En ocasiones, las visiones del “otro lado” del espejo parecen proyectarse tridimensionalmente en el espacio del psicomanteum, a menudo descritas como “más allá de lo real,” es decir, como más reales que la realidad misma.

Os dejo aquí el comienzo de la película basada en el libro del doctor Moody, por si a alguien le interesa.
 Aunque personalmente pienso que estas teorías no son más que supersticiones y una mera búsqueda de autoconvencimiento de que no desaparecemos y de que hay algo mejor después (vamos, que no morimos), no deja de parecerme interesante informarse sobre los planteamientos que realizan las personas que sí creen en ello.



(Actualmente el servicio de psicomanteum es ofrecido por psicólogos y terapeutas en varios países y está dirigido a personas profundamente interesadas en establecer un contacto con el ser querido fallecido. La experiencia requiere un serio compromiso emocional. Participar en una sesión de psicomanteum no garantiza la experiencia de “encuentro.” Las sesiones normalmente están dirigidas y acompañadas por un monitor o coordinador especializado)